JOSÉ MARÍA ROJO (IEME_Peru)
«Aquí hay enfermedades como el dengue o el zika que se llevan a la gente de encuentro a la tumba»
Al principio, el problema le pareció lejano porque en ese momento había dramas tan cercanos como la muerte de 20 personas cuando el coronavirus ni siquiera se había manifestado en Perú. «Es muy fácil decir que nada ya será igual, que saldremos mejores. Eso esperamos pero… en el mundo mueren 8.500 niños al día de hambre y solo en Lima 170.000 niños menores de tres años anémicos; y tenemos la vacuna: comida», comenta firme José María Rojo García, nacido en Villeza de las Matas. «Tenemos en mi misma parroquia bolsones importantes de tuberculosis que, con el zika, se llevan de encuentro a la tumba a la gente». Las palabras de este sacerdote diocesano cuya misión está en Villamaría del Triunfo (Lima Sur) resultan desoladoras en un momento en el que la pandemia ya empieza a asomar sus garras con cerca de 8.000 casos positivos y 173 fallecidos hasta el día de la entrevista.
En palabras de Rojo, con una larga experiencia en misiones, «si no cambiamos nuestro estilo consumista de vivir (sobre todo en occidente) y si no cambiamos el sistema neoliberal —las dos cosas en las que insiste el papa Francisco— volveremos más pronto que tarde a las mismas: destinaremos a la salud presupuestos ridículos, destinaremos a los pobres presupuestos ridículos, seguiremos poniendo en el centro la economía, o sea, el lucro, la ganancia y no las personas, y seguiremos produciendo descartables». Entre otras muchas preguntas, el sacerdote leonés cuestiona si cuando todo se estabilice «habremos aprendido que un simple virus pone de rodillas al mundo entero y que no somos dioses».
(Diario de León-20 de abril de 2020)