El nacimiento del belén tal y como hoy los conocemos debe atribuirse a San Francisco de Asís, que tras regresar de la ciudad de Belén profundamente emocionado, quiso celebrar en Greccio una Natividad muy especial en la que pudiese participar todo el pueblo. Gracias a su amistad con un terrateniente del pueblo y tras pedir permiso al Papa de Roma – por entonces Honorio III – escogió una cueva, montó allí un pesebre, erigió una figura de piedra que representaba al niño Jesús y llevó a su lado a un buey y una mula reales. La noche de Navidad acudió con toda la comunidad cristiana a rezar junto al pesebre, donde pronunció un bonito sermón y dice la leyenda que el acto fue tan emocionante y la comunidad rezaba con tal devoción que cuando el santo tomó en brazos al niño de piedra este cobró vida al instante.
San Francisco nos enseño que cualquier sitio es bonito y emocionante para montar el Pequeño Pesebre. Nosotras un año más y desde este área de misiones queremos recordar ese momento que para san Francisco fue tan emocionante. y por ello volveremos hacer la exposición de Belenes del mundo en su casa.Un año más y desde todos los lugares del mundo, realizaremos la exposición de Belenes del Mundo, traídos desde muchos lugares por nuestros misioneros, ellos quieres felicitar la Navidad de este modo tan bonito. Os esperamos a todos a participar, y como no que nuestros niños vea lo que significa la Navidad con esta exposición. Que el Niño Jesús nos enseñe a todos a emocionarnos un poco más con su llegada y sea para todos un momento de paz y alegría, que no solo dure un día sino los 365 días del año.